¿Alguna vez escuchaste una nueva canción, pero su melodía o ritmo te parecían familiares? Este recurso se llama sample, que se traduce literalmente como “muestra” y es un fragmento de música que se utiliza para la creación de una nueva obra. El verdadero encanto de un sample está en cómo se puede modificar el fragmento seleccionado, ya sea aumentando o disminuyendo su velocidad, aplicando efectos o combinándolo con otros sonidos e instrumentos musicales.
Hay miles de canciones creadas con la técnica de sampling, pero entre los más conocidos se puede mencionar a “Please, Don’t Stop The Music” de Rihanna que utiliza los coros de “Wanna Be Starting Something” de Michael Jackson y “On The Floor” de Jennifer López que se compuso con el ritmo de “Lambada” de Kaoma.
Para no caer en conflictos legales por plagio es indispensable que conozcas que primero se requiere la autorización para usar un sample. Al crearse una nueva pista partiendo de una obra preexistente están involucrados varios derechos, por lo que se necesita de la autorización del titular de derechos, además del permiso de las disqueras o productoras que tienen los derechos sobre el fonograma o master de la canción. Al igual que en la sincronización (colocar una canción en otra producción de diferente formato como películas o series), antes de permitir el uso de la obra, se establecen las condiciones de uso y se acuerda una vigencia para el sample, que puede ser de por vida o por tiempo limitado.
En cuanto a regalías, estas las reciben los autores o compositores originales y no quien tomó el sample para su nueva canción. A menos que se llegue a un acuerdo y el titular de derecho seda un pequeño porcentaje de sus regalías por la nueva versión creada y registrada.
Dependiendo de la legislación de cada país las obras tienen ciertos años para generar derechos autorales, en Ecuador es 70 años después de la muerte del autor, es decir, hasta ese momento se reciben regalías. Después de dicho período de tiempo, la obra pasa a estar en el medio público, por tanto, es posible usar esa canción siempre y cuando se cuide su estructura y se respeten los lineamientos para los cuales fue creada. Por esta razón, un sample también proviene de canciones clásicas, un ejemplo es “Memories” de Maroon 5 que utiliza los acordes de violonchelo de “Canon en Re” de Johann Pachelbel.
Entonces, ¿Se recomienda o no emplear un sample? Las canciones con nuevas letras y melodías son llamativas y caracterizan el trabajo de cada autor o compositor. Pero, por otra parte, hay sonidos o piezas instrumentales memorables que muchas veces ayudan a que una canción sea un éxito. La decisión sobre su uso va a depender del creador de la obra y el producto final que desee mostrar a sus seguidores.